Manuel Antonio es la atracción turística número #1 de Costa Rica, ¡y con razón! Aquí encontrará las playas más hermosas del país, la mayor variedad de cafés y restaurantes, todos los servicios y comodidades que pueda necesitar, y los animales que hacen famosa a Costa Rica: guacamayos, tucanes, perezosos, monos, ballenas y delfines son solo algunas de las criaturas que llamará "vecinos". Selvas, montañas, playas, aventura, animales tropicales y el océano: ¿qué más se puede pedir?

Con recepción atendida y acceso a través de un pasillo exterior cubierto, este espacioso apartamento en planta baja le da la bienvenida con su cálida y suntuosa decoración: las puertas de madera, los armarios, las molduras y los acabados aportan un toque natural a la sala de estar. La cocina totalmente equipada, junto al baño, da a la barra de desayuno y a la sala de estar/comedor. Los cómodos sofás ofrecen una magnífica vista de la vegetación y los jardines tropicales. Más allá, un patio cubierto está a pocos pasos de las zonas verdes y la piscina. Con abundantes asientos y una hamaca, el patio es perfecto para recibir invitados, relajarse, disfrutar de una comida o observar a los animales exóticos que van y vienen día y noche.

El primer dormitorio incluye una cama individual y una individual, mientras que el amplio dormitorio principal con baño en suite cuenta con una cama queen. El dormitorio principal tiene aire acondicionado y el dormitorio cuenta con ventilación central. Ambas habitaciones son luminosas y espaciosas.

En el exterior, hay amplio estacionamiento para residentes y visitantes, mientras que los jardines paisajísticos, con esculturas, bancos y una fuente, añaden un toque de sofisticación. Los baños públicos brindan comodidad y conveniencia a residentes e invitados. Una enorme piscina, una gran piscina infantil, cabañas y sombrillas, zona de barbacoa, canchas de voleibol y dos pistas de tenis, además de acceso cercano a excursiones en barco y transporte, son la guinda del pastel.

Imagina despertar, con un café caliente en la mano, para relajarte en el patio mientras los ruidosos animales de la selva anuncian el comienzo de un nuevo día. Un desayuno rápido y ¡listo para nadar, jugar al tenis o al voleibol, todo en el condominio! Después, encenderemos la barbacoa para un merecido almuerzo, ¡y tu día estará a medio camino! ¿Adónde ir después? ¿A la playa, de compras, a un cóctel junto al mar con amigos? ¡Esta puede ser tu nueva vida!
(RM/BB)